15 May Academia Diplomática y la Delegación de la Unión Europea en Chile, organizaron el webinar “La Respuesta Global al COVID-19: la cooperación internacional frente a una nueva realidad”.
Con la presencia del Subsecretario (s) RR.EE, Embajador Raúl Fernández; el Director de la Academia Diplomática, Embajador Miguel Ángel González; la Embajadora de la Unión Europea en Chile, Stella Zervoudaki; y de la Coordinadora Residente del Sistema de Naciones Unidas en Chile, Silvia Rucks; se realizó ayer el webinar “La Respuesta Global al COVID-19: la cooperación internacional frente a una nueva realidad”.
La actividad, organizada en el marco de la celebración del “Día de Europa” y aniversario de los 70 años de la Declaración Schuman, tuvo como objetivo conocer la visión de la Unión Europea sobre el rol de la cooperación y las alianzas internacionales frente a la crisis sanitaria global. El espacio permitió también escuchar las reflexiones de Chile y del Sistema de Naciones Unidas en torno a los desafíos y aprendizajes que ésta representa para el sistema multilateral.
En sus palabras de apertura, la Embajadora Zervoudaki abordó la visión de la Unión Europea sobre el rol de la cooperación y las alianzas internacionales frente a la pandemia del COVID-19.
En ese sentido afirmó que “tenemos la responsabilidad de visibilizar los logros de la cooperación multilateral así como de fortalecer los mecanismos de diálogo con la ciudadanía. Esta pandemia no conoce fronteras, y requiere una cooperación intensiva. Es por eso que la Unión Europea está lanzando el paquete “Equipo Europa” para apoyar a sus socios en la lucha contra el coronavirus y sus consecuencias.
Para ello, la Embajadora Zervoudaki destacó que se ha puesto en marcha un plan que ha movilizado el 16% del PIB de Europa, 3.4 trillones de euros a nivel sanitario para cooperación en investigación, la adquisición de material para garantizar los suministros, pero también para proteger empleos y empresas dentro de la Unión Europea”.
Por su parte, el Embajador Fernández, se refirió a la mirada chilena de los desafíos y oportunidades de las alianzas internacionales en el contexto de la pandemia.
“Chile tiene un compromiso con la respuesta a esta pandemia, a nivel nacional pero también como un Estado que promueve y contribuye al multilateralismo. Por ello, nuestras autoridades han anunciado una iniciativa para elaborar un instrumento global para la preparación y respuesta multidimensional a las pandemias”. destacó.
Asimismo, el Embajador Fernández se refirió a la apuesta que, hace décadas, ha hecho Chile por la asociación, la cooperación y la solidaridad.
“Este es un momento para reforzar decisiones que consideren diversas dimensiones de la responsabilidad de cooperar.”
Lo anterior, lo ejemplificó con el esfuerzo que se realizó con muchos países de la región, y otros más alejados, para que alrededor de 75 mil chilenos pudieran retornar al país. También en el entendimiento con Bolivia, país con el que no se tiene relaciones diplomáticas, pero con el que se pudo gestionar la posibilidad de facilitar el regreso de sus connacionales, en una muestra de disposición y voluntad conjunta.
A continuación, Silvia Rucks, reflexionó en torno a las lecciones para el Sistema de Naciones Unidas.
“La crisis del COVID-19 es la prueba más grande a nivel mundial desde la creación de la ONU, lo que nos recuerda la importancia del multilateralismo para hacer frente a la pandemia en sus diversas dimensiones con el objeto no sólo para recuperarnos del virus y sus efectos, sino para reconstruirnos mejor. Y en ese punto, no podemos sino enfocarnos en la Agenda 2030 y los objetivos y metas de desarrollo sostenible”.
Al mismo tiempo, la Coordinadora Residente del Sistema de UN en Chile destacó que “hay que pensar hacia adelante en las consecuencias económicas, humanitarias y, en algunos países, puede que políticas, de esta crisis que partió como sanitaria”.
Sobre la respuesta de Naciones Unidas, destacó la elaboración, en abril, del “Marco de las Naciones Unidas para la respuesta socioeconómica inmediata a COVID-19”, surgido a partir de lecciones aprendidas de otras crisis, como la del brote del ébola en 2014. Se trata de una hoja de ruta para levantar las economías y salvar los empleos después de la pandemia.
“La crisis del COVID-19 es la prueba más grande a nivel mundial desde la creación de la ONU, lo que nos recuerda la importancia del multilateralismo para hacer frente a la pandemia en sus diversas dimensiones con el objeto no sólo para recuperarnos del virus y sus efectos, sino para reconstruirnos mejor. Y en ese punto, no podemos sino enfocarnos en la Agenda 2030 y los objetivos y metas de desarrollo sostenible”.
A modo de conclusión, el Embajador Miguel Ángel González, quien ofició como moderador de la actividad, señaló que “es indudable que el tema de la pandemia despierta una gran expectativa. Ello, por el impacto que tiene tanto en las personas que van a ser afectadas, como por las tensiones que produce a nivel de los aparatos del Estado para dar la respuesta adecuada, y la diversidad de opciones que está dando el sistema multilateral. Un problema global requiere respuestas globales y éstas se dan precisamente en el marco de los esfuerzos multilaterales”.
El Director de la Academia Diplomática, acentuó también que “la crisis no terminará de un día para otro y que cada uno de nosotros tiene que asumir con responsabilidad y compromiso conductas individuales y colectivas para contribuir a paliar los efectos de la crisis”.
“La situación que vivimos nos empuja hacia un futuro en que la teleactividad emerge como una herramienta para enfrentar diversas dificultades como, por ejemplo, el problema actual de transporte que contribuye al calentamiento y deterioro del planeta”.
Para finalizar este webinar, al que estuvieron conectados los alumnos de la Academia Diplomática y más de 100 personas, el Embajador González agradeció a las altas autoridades que expusieron, desde distintas perspectivas, cómo el mundo y los organismos están enfrentando esta emergencia”.