27 Oct Responsabilidades y desafíos del multilateralismo en tiempos de Pandemia
- ACADE recomienda mayor coordinación y cooperación.
En el marco de un esquema de formación asociativo con la Dirección de Política Multilateral (DIMULTI) de la Cancillería, los 16 estudiantes de primer año, abordaron distintas dimensiones de la pandemia del COVID-19.
Esta metodología innovadora busca profundizar el entrenamiento, con sentido práctico, en temas de la agenda del Sistema Multilateral. La idea es que los futuros diplomáticos vayan asumiendo los mecanismos del oficio en las propias direcciones.
Lorena Pérez, Jorge Torres, Rafael Du Monceau y Emilio Yáñez iniciaron las exposiciones al abordar el tema “Pandemia y Arquitectura Global de la Salud”. Este trabajo, guiado por la Primera Secretaria Olivia Cook, analizó diversos desafíos que plantea la implementación y ejecución de mecanismos para fortalecer las capacidades y herramientas en orden a prevenir y responder a las amenazas globales de la salud.
En este contexto, se valoró la interacción y el diálogo con los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil, en el espíritu de contribuir a los procesos de toma de decisiones. Esta idea colaborativa se expresa en tres pilares: centros de pensamiento; mecanismos de reuniones con diferentes actores públicos y privados y el impulso de centros colaborativos de la OMS en Chile y en la región.
Lo interesante fue la identificación de algunas propuestas como:
- Apoyar la revisión del Reglamento Sanitario Internacional.
- Favorecer la reforma de la OMS.
- Reforzar el mecanismo multilateral COVAX, administrado por la alianza GAVI, para un acceso equitativo y mundial a las vacunas.
- Estimular el fortalecimiento de las capacidades nacionales para detectar y contener emergencias sanitarias, creando bases de datos y acuerdos de colaboración entre laboratorios internacionales e instituciones chilenas.
- Fortalecimiento de la respuesta y preparación a futuras pandemias.
Luego, el tema “Pandemia y Agenda 2030”, preparado por Guido Benavides, Jorge Díaz, Andrés Meza y Arantxa Ríos, guiado por la Tercera Secretaria Alejandra Farías e Iris Salinas, revisó la institucionalidad de la Agenda 2030 y de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible. Se reflexionó en torno a la implementación de este compromiso político de Naciones Unidas en el escenario post-COVID-19. Quedó en evidencia que el tema del desarrollo sostenible en sus dimensiones económica, social y ambiental continuará movilizando a la comunidad internacional.
Se analizó el contenido del Informe de Naciones Unidas sobre el contexto del COVID-19 en América Latina y el Caribe. Allí se sitúa la Agenda 2030 en el centro de la reconstrucción o reestructuración de la región después de la pandemia. Conviene subrayar que Chile se muestra como uno de los países más avanzados en el cumplimiento de la Agenda 2030.
Con esta lógica, los estudiantes abordaron el posicionamiento de Chile para poner en práctica los ODS. Se analizó la institucionalidad interna: el Consejo Nacional para la implementación de la Agenda 2030. Llamó la atención la propuesta de potenciar la gestión del desarrollo territorial de los ODS, a través del establecimiento de asociaciones con universidades locales. Por último, se relevó la posibilidad de un “efecto spillover” para favorecer la implementación efectiva del cumplimiento de la Agenda 2030: el cumplimiento de un ODS puede incidir en mejoras para alcanzar dos o más ODS.
El tercer tema, “Pandemia, paz y seguridad” fue desarrollado por Martín Gormaz, David Hansen, Pedro Pizarro y Constanza Sarabia, quienes fueron guiados por el Primer Secretario Juan Pedro Sepúlveda.
En este ámbito, se abordó el impacto multidimensional de la pandemia, que trasciende su carácter meramente sanitario. Un aspecto central de la reflexión fue el análisis de cómo este tipo de crisis puede afectar la paz y seguridad internacionales. En este sentido, es interesante observar las capacidades de acción del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para actuar en estas situaciones.
Los análisis reafirmaron la posición de Chile en el sentido de que la pandemia constituía una amenaza a la paz y seguridad internacionales y, en consecuencia, el Consejo de Seguridad de las NU debería estar en condiciones de tomar decisiones como lo había hecho en otras situaciones similares (Ébola, SIDA-VIH).
Al abordarse las amenazas a la paz y seguridad internacionales, este ejercicio abrió un espacio para analizar el funcionamiento del Consejo de Seguridad, el tema del Veto y también el concepto de “Neutralidad Activa”. Estos son elementos que posiblemente guiarán y articularán posiciones y definiciones de la comunidad internacional y de nuestro país.
El “Perfil de Chile en la 75° Asamblea General” fue analizado por Abel Muza, Emanuel Ruz, Mathias Sedarkevich y Cristóbal Sandoval, guiados por Juan Pedro Sepúlveda. Este trabajo grupal incluyó una visión sobre las perspectivas de la “Cooperación y Desarrollo Sostenible”, como piezas esenciales de la gobernabilidad global. El desafío es repensar el multilateralismo para responder a cuestionamientos que antecedían al COVID-19.
En una situación post-pandemia, probablemente, habrá que readecuar mecanismos de cooperación y coordinación interinstitucionales, además de aquellos de vinculación y participación ciudadana. En definitiva, el tema de fondo es cómo renovar el compromiso político de actores de reconocida influencia en las relaciones internacionales contemporáneas.
En este escenario, los estudiantes examinaron temas vinculados al desarrollo sostenible, la ciencia, la tecnología, las tensiones comerciales, la cooperación y las diversas manifestaciones de temas como la transformación y conectividad digitales.
En una mirada prospectiva, se señaló que la crisis descrita podría sustentar hipótesis que postularan un retorno a la era de pre-globalización. Más allá de planteamientos o decisiones proteccionistas, hubo una apreciación compartida en orden a relevar el riesgo de desarticular cadenas de valor. Ello podría impactar la producción, los costos, la competitividad y los salarios entre otras variables.
La conclusión de este espacio reflexivo estuvo orientada a relevar la oportunidad para revitalizar el valor de la acción colectiva. Sin desconocer las falencias y debilidades de Naciones Unidas, hoy más que nunca emerge el desafío de construir más multilateralismo para el cual la política exterior de Chile debe estar en condiciones de actuar con liderazgo y de reafirmar nuestras ventajas comparativas, como lo señaló recientemente el canciller Andrés Allamand.
Esta instancia académica fue apreciada por DIMULTI por la calidad, interés y preparación de los estudiantes, además de ser un verdadero acervo para el trabajo de esa Dirección en la presente coyuntura sanitaria.
El Director de Política Multilateral, Embajador Cristián Streeter destacó el nivel académico y profesional de las presentaciones elaboradas por los estudiantes. Indicó que el hecho de incluir un formato de propuestas, acercó este ejercicio a la forma en la cual que se trabaja en Cancillería.
En tanto, el Embajador Pedro Oyarce, Coordinador de la cátedra de Sistema Multilateral, valoró el apoyo brindado por DIMULTI. Evaluó positivamente esta metodología de aprendizaje que vincula a los futuros diplomáticos al oficio real y que estimula, gradualmente, el proceso de transición desde la Academia hacia las labores diplomáticas plenas que asumirán en la Cancillería.
Es interesante, por último, consignar que este tipo de ejercicios es altamente apreciado por los estudiantes lo que representa un estímulo para una formación de futuro, plena e integral.
Los contenidos de este entrenamiento –fichas y anexos- serán incorporados a una cápsula, prontamente disponible en la web de la Academia Diplomática. La idea es que este tipo de análisis, sintético y focalizado, puedan ser utilizados por la ciudadanía interesada en temas multilaterales.